viernes, 2 de noviembre de 2012

Un sueño

Foto: EJB


Se parte en dos y se desliza el color púrpura del telón: dos mantos pesados y enormes descubriendo la intimidad del escenario. Polvo en la madera, pisadas que nunca nadie limpia a lo mejor para que veamos el rastro de lo acontecido antes de nuestra llegada. En el fondo el negro, la nada. Y apareces tu, solo, sola. Un haz de luz despiadado te ciega. No ves a nadie, pero te llega un carraspeo lejano. Algo hay allí, ante ti, esperando que digas algo. El silencio se tensa como un arco de violín al límite de su resistencia. Tu mirada recorre el vacío y de repente te aplauden. ¡No has dicho ni hecho nada y te aplauden! Sólo por estar allí, bajo los focos terribles que iluminan tu incapacidad para esconderte de ellos. Sólo porque ven en ti su propia soledad.

EJB